MEDIOS Todo el mundo puede olvidar un ascenso o un descenso. Puede olvidar un gran gol o un gran partido. Un penalti errado o una falta magistralmente lanzada. Lo que no podemos olvidar es a un gran jugador que da su vida por su club y por el fútbol.
Ánimo a toda la familia, a todos los amigos y conocidos, a todos los sevillistas, a todos los españoles y a todos los seguidores del fútbol del mundo que desgraciadamente no podrán disfrutar de sus partidos y sobre todo de la gran persona que era.
ANTONIO PUERTA
Luchó hasta la muerte por su club. Su zurda de diamante siempre será recordada por todo el mundo del fútbol. Éste jóven jugador falleció tras una serie de paradas cardiorespiratorias que comenzaron en el fatídico minuto 29 del partido Sevilla-Getafe de la primera jornada de liga que se disputó el sábado 25 de agosto. Su evolución iba siendo favorable hasta que el martes 28 empezó a empeorar y finalmente ese mismo día a las 2 y media de la tarde se apagó su corazón. Su muerte no sólo conmocionó a los seguidores de Sevilla sino a todo el mundo del fútbol ya que además de un grandísimo jugador era una persona como desgraciadamente pocas hay hoy en día. Todos los equipos de fútbol demostraron su afecto por el jugador con innumerables homenajes y consiguió que equipos como el Betis y el Sevilla cuyas relaciones estaban totalmente rotas, sobre todo cuando un aficionado del Betis le lanzó una botella al entrenador del Sevilla que provocó la hospitalización de Juande Ramos, se comportasen como auténticos hermanos. No sólo en España se acordaron de él ya que equipos como el Shalke 04 alemán, al que el Sevilla eliminó en la Uefa también mostró sus condolencias. Incluso el Milan, campeón de Europa, se puso a disposición del Sevilla para suspender el partido de Supercopa y antes del partido llevaron todos una camiseta con el nombre del jugador. Este gesto lo repitieron algunos equipos de primera división de España y la selección española en su partido ante Islandia.
Gracias Puerta por tu fútbol, por tu mágico gol que significó una final y una Uefa, por la garra, por tu coraje, por tu ejemplo, y sobre todo por tu forma de ser fuera del terreno de juego. Puerta no ha muerto, le ha fichado Dios para su equipo y con ese fichaje ha conseguido unir Sevilla, España y todo el mundo del fútbol.
Descansa en paz amigo.